Un mensaje sobre la Proposición 1

Queridos hermanos y hermanas en Cristo:

A estas alturas, sin duda ya se habrán enterado de que la Proposición 1 fue aprobada. Aunque esto es tremendamente decepcionante y no es el resultado por el que hemos estado trabajando y orando, aún hay mucho que agradecer y por lo cual estar orgullosos.

Nuestro más profundo agradecimiento a todas las personas que generosamente respondieron al llamado de concientización contra la Proposición 1. Nuestras diócesis y parroquias católicas se manifestaron de una manera y con una intensidad que no se puede negar, y las encuestas y los resultados electorales lo demuestran.

Aunque la medida tuvo éxito, el número de californianos que se identifican como pro-vida ha aumentado en casi un diez por ciento desde que comenzó esta campaña. En cambio, el número de californianos que se identifican como a favor del derecho a decidir ha descendido siete puntos porcentuales, del 62% al 55%. Hemos demostrado que podemos unirnos y ser convincentes a la hora de abogar contra el impulso extremo, caro e innecesario del aborto tardío.

Gracias a nuestros obispos, que se pronunciaron en contra de la Proposición 1 y nos guiaron a través de las polémicas aguas del aborto en California con el corazón de Cristo, proclamando la dignidad de cada vida humana.

Gracias a todos los sacerdotes, diáconos y personal del clero que valientemente llevaron la lucha contra la Proposición 1 a los feligreses a través de homilías y eventos entusiastas.

Gracias a todos los líderes diocesanos y a los capitanes de las parroquias que dedicaron tanto tiempo a la organización, a la creación de materiales y a la comunicación de la verdad sobre la Proposición 1.  

Gracias a todos los feligreses que dedicaron su valioso tiempo a nuestra coalición, desde la realización de campañas de captación de votantes hasta la colocación de carteles en el jardín y mucho más.

Por último, gracias a cada persona que representa las manos y los pies de Cristo, caminando diariamente con las mujeres, los niños y las familias que pasan grandes necesidades en nuestras comunidades.

A principios de este año, los obispos de California declararon su firme decisión de “comprometerse con nuestras hermanas a que nosotros, la comunidad católica de California, estemos a su lado en el proceso de la maternidad”. En nuestras parroquias, desde los baby showers hasta las donaciones y las campañas de concientización, la comunidad católica está presente para cada mamá, papá y familia a través de nuestra red de centros de recursos, clínicas de atención en el embarazo, hogares de maternidad y centros de llamadas. Ahora es el momento de celebrar nuestro éxito y revigorizar nuestro apoyo a las mujeres a través de. We Were Born Ready (Nacimos Listos).

Hemos respondido a nuestra llamado evangélico de servir en favor de los más vulnerables y de compartir el amor de Cristo Jesús. Y a pesar de la aprobación de la Proposición 1, podemos descansar sabiendo que el Señor ve nuestro trabajo y reconoce nuestra lucha. Porque el núcleo de nuestra misión como cristianos es evangelizar, difundir la buena nueva de Jesús al mundo. Construimos el reino de Dios aquí en nuestro medio, pero nuestra mentalidad es eterna, con la esperanza del mundo por venir.

 

“En el mundo tendrán tribulaciones, pero tengan valor, porque yo he vencido al mundo”.  Juan 16,33

La Conferencia Católica de California

Share this Post